Hoy quiero hablarte sobre la importancia del autoconocimiento y cómo aceptar y gestionar los cambios puede ser una oportunidad de crecimiento. 

¿Sabes Cómo te sientes al comenzar?

El 66,1% de la población no inicia el cambio por miedo a fracasar. Este temor paraliza y nos impide avanzar hacia nuestros objetivos. 

Otro tanto, tiene MIEDO AL ÉXITO, si, al éxito, a que las cosas salgan cómo quieren y les hagan salir de su zona de confort, que aunque “se quejan” en el fondo, están cómodas.

Comenzar es un desafío. Todos brindamos en Nochevieja con mil propósitos y miles de ilusiones que se desvanecen por el miedo a no alcanzarlas, por el miedo a fracasar, o por alcanzarlo y .. entonces qué? Decidir hacer un cambio, por pequeño que te parezca, es una decisión de VALIENTES que requiere de CORAJE: corazón y valentía para que no se desvanezca en el paso de los días.

Te pregunto, ¿qué sientes tú?

Acepta el Cambio

La vida es un constante flujo de cambios, similar a las transiciones del día y la noche. Al igual que aceptamos que cada día da paso a la noche y viceversa, debemos aprender a abrazar la incertidumbre y adaptarnos a las nuevas situaciones. La flexibilidad nos permitirá enfrentar los desafíos con una mente abierta, listos para aprovechar cada oportunidad que surja.

1. Ver el Cambio como una Oportunidad

Uno de los mayores obstáculos que enfrentamos es ver el cambio como una amenaza en lugar de una oportunidad. Sin embargo, al cambiar nuestra perspectiva y aceptar el cambio como una parte esencial de la vida, podemos comenzar a verlo de manera positiva. La clave está en confiar en que todo irá bien y que incluso los “eventos menos agradables” pasarán, dejando espacio para nuevas oportunidades y crecimiento.

Cada cambio, incluso los que inicialmente parecen negativos, trae consigo la posibilidad de nuevas oportunidades. Al mantener una mente abierta y flexible, podemos identificar y aprovechar estas oportunidades. Esta capacidad de ver el potencial en cada situación es lo que nos permite crecer y evolucionar continuamente.

2.Confianza en el Proceso

Aceptar el cambio requiere confianza en el proceso de la vida. Esta confianza se basa en la comprensión de que, al igual que el arcoíris sigue a la tormenta, cada situación difícil eventualmente dará paso a algo positivo. Esta mentalidad no solo nos ayuda a manejar mejor los momentos difíciles, sino que también nos prepara para recibir las nuevas oportunidades que se presentarán.

3.La Impermanencia de las Dificultades

Las dificultades y los desafíos son inevitables, pero también son temporales. Al aceptar la naturaleza transitoria de estos eventos, podemos mantener una perspectiva equilibrada y esperanzadora. Sabemos que, aunque la tormenta sea intensa, no durará para siempre. Al mantener esta perspectiva, podemos enfrentar los desafíos con una mayor calma y resiliencia.

En este post de Bancaria a Terapeuta Holística te cuento uno de mis cambios.

Aceptar el cambio implica reconocerlo como una parte natural e inevitable de la vida. Al hacerlo, podemos transformar la incertidumbre en una fuente de posibilidades infinitas y disfrutar del proceso de crecimiento personal. Así como el día sigue a la noche y el arcoíris sigue a la tormenta, cada cambio trae consigo la promesa de nuevas oportunidades y experiencias enriquecedoras.

¿Cómo mantenerte en el cambio? Comprométete.

La falta de compromiso es una de las principales razones por las que abandonamos nuestros objetivos. Las excusas, las trampas de la distracción, la indisciplina y la frustración son obstáculos comunes que todos enfrentamos en el camino del cambio. Superar estos desafíos requiere un fuerte autocompromiso. Aquí te dejo algunas estrategias clave para mantenerte en el cambio y alcanzar tus metas:

1.- Márcate Objetivos Claros

Definir metas específicas y alcanzables es el primer paso para comprometerte con el cambio. Cuando tienes objetivos claros, sabes exactamente qué quieres lograr y puedes trazar un plan detallado para llegar allí. Esto no solo te proporciona una dirección, sino que también te motiva a seguir adelante.

– Específicas: En lugar de «quiero ser más saludable», define «quiero hacer ejercicio tres veces por semana».

– Medibles: Asegúrate de que puedas seguir tu progreso, como «perder 5 kilos en tres meses».

– Alcanzables: Establece metas realistas que puedas lograr con el tiempo y los recursos disponibles.

– Relevantes: Alinea tus objetivos con tus valores y prioridades.

– Temporales: Pon un plazo para tus metas para mantener la urgencia y el enfoque.

2.-Date las Gracias

Reconocer y celebrar tus pequeños logros diarios es crucial para mantener la motivación. A menudo, subestimamos la importancia de los pequeños pasos, pero cada uno de ellos te acerca a tu objetivo final. Apreciar estos logros te ayudará a mantener una actitud positiva y a reforzar tu compromiso.

– Diario de logros: Lleva un registro de tus progresos diarios y celebra cada pequeño paso adelante.

– Auto-reconocimiento: Tómate un momento cada día para agradecerte a ti misma por el esfuerzo y el progreso que has hecho.

– Recompensas: Establece pequeñas recompensas para ti misma cuando alcances hitos específicos.

3.Mantén tu Voluntad

Cultivar la autodisciplina y el enfoque es esencial para mantenerse en el camino del cambio. La voluntad no es algo con lo que nacemos, sino una habilidad que podemos desarrollar con práctica y paciencia. Aquí es donde empezamos a ponernos excusas, donde el autoconocimiento juega un papel crucial. Para para poder analizar qué estamos haciendo, qué excusa nos estamos poniendo para alejarnos de nuestro objetivo sin juicio, desde el saber por qué y poder detectarlo para solucionarlo. En ocasiones, son creencias tan tan del inconsciente que aparentemente son inapreciables, de ahí la importancia de autoconocerse y pedir ayuda a profesionales que puedan acomañarte en este proceso.

– Elimina distracciones: Identifica y minimiza las cosas que te distraen de tus objetivos.

– Enfócate en el proceso: Concéntrate en las acciones que puedes controlar y en el esfuerzo que pones cada día.

– Resiste las tentaciones: Aprende a decir no a las cosas que pueden desviar tu atención y esfuerzo.

4.Auto-disciplina

Establecer rutinas que te ayuden a mantener el rumbo es una forma efectiva de reforzar tu compromiso. La autodisciplina no se trata solo de fuerza de voluntad, sino de crear hábitos y sistemas que te apoyen en tu camino. Piensa lo sencillo que desde niños nos es ir al colegio, al principio puede que llores, sin embargo, con el paso de los años, sabes que es un compromiso para tu futuro y lo haces, has adquirido el habito, igual ahora. Decidir hacer un cambio, o afrontar los cambios que nos trae la vida y seguir adalente, requiere de auto-disciplina. Te pongo un ejemplo, imagintate: tienes tu propia rutina de auto-cuidado, salir a correr, meditar… de un día para otro,un familiar cae enfermo y requiere de tu ayuda. TU papel en la familia cambia, necesitas adquierir un nuevo roll que lleve más tareas adelante. La primera opción, sería olvidarte de tu tiempo de auto-cuidado y entregarte al resto. Sin embargo, aquí te digo: ¡STOP! Desde el auto-conocimiento, manten la auto-disciplina contigo misma, sino tienes tanto tiempo, haz menos tiemo, si un día no puedes, hazlo al siguiente, pero no te alejes y te olvides del compromiso contigo. Como mujer, no es fácil irnos a cuidar fuera y olvidarnos.

– Rutinas diarias: Diseña un horario diario que incluya tiempo para trabajar en tus objetivos.

– Planificación anticipada: Planifica tus actividades con antelación para evitar la procrastinación y la indecisión.

– Responsabilidad:Encuentra formas de mantenerte responsable, como compartir tus metas con un amigo o mentor.

5.Superando Obstáculos

Para mantenerte en el cambio, también es importante reconocer y superar los obstáculos comunes que pueden surgir:

– Excusas: Sé consciente de las excusas que te das a ti misma y busca formas de superarlas. Pregúntate siempre si realmente no puedes hacer algo o si simplemente es una excusas.

– Trampas de la distracción: Identifica tus principales fuentes de distracción y desarrolla estrategias para minimizarlas. Esto podría incluir apagar notificaciones del teléfono o establecer tiempos específicos para revisar el correo electrónico.

– Indisciplina: Trabaja en desarrollar hábitos que te mantengan en el camino. Esto podría incluir establecer recordatorios o crear un entorno que favorezca la autodisciplina.

– Frustración: Aprende a manejar la frustración practicando técnicas de relajación y recordándote a ti misma por qué empezaste este viaje en primer lugar. Aceptar un NO, un error, una caída no como algo personal, sino como parte del cambio, para aprender qué te está requiriendo la situación y qué requieres tú para ella.

Mantenerte en el cambio es un proceso continuo que requiere compromiso y esfuerzo diario. Al seguir estas estrategias y cultivar un fuerte autocompromiso, podrás enfrentar los desafíos con confianza y perseverancia, avanzando continuamente hacia tus metas.

Desmotivación y Caídas en el Cambio

El 92% de la población no cumple sus objetivos, y es natural enfrentar caídas y desmotivación en el proceso de cambio. Sin embargo, es posible superar estos desafíos con algunos consejos clave:

– Confianza en ti misma: Cree en tus capacidades y en tu potencial. La confianza es fundamental para persistir y superar obstáculos. Recuérdate a ti misma tus habilidades y logros pasados.

– Amor propio: Cuida de ti misma y de tu bienestar emocional. Practicar el amor propio te proporciona la fortaleza emocional necesaria para seguir adelante, incluso cuando enfrentas dificultades. Dedica tiempo a actividades que te hagan sentir bien y te recarguen.

– Respeto y admiración: Honra tus esfuerzos y logros, sin importar cuán pequeños sean. Reconocer y valorar tus propios esfuerzos te motiva a seguir adelante y te ayuda a mantener una perspectiva positiva.

– Honra tu proceso: Acepta que cada paso, incluso los tropiezos, son parte de tu camino de crecimiento. Entender que los errores y las caídas son oportunidades de aprendizaje te permite avanzar con una mentalidad resiliente y optimista.

Superar la desmotivación y las caídas requiere una combinación de autoconfianza, amor propio, respeto por tus esfuerzos y aceptación de tu proceso personal. Estos elementos te ayudarán a mantenerte en el camino hacia tus objetivos, incluso en los momentos más difíciles.

Desarrollo de Estrategias Personalizadas

El autoconocimiento es la base para diseñar estrategias de afrontamiento que se adapten a tus necesidades individuales. Comprender tus propias fortalezas, debilidades y preferencias te permite gestionar el estrés de manera efectiva y alcanzar tus objetivos. Aquí hay algunos pasos clave para desarrollar estrategias personalizadas:

1. Meditación

La meditación es una herramienta poderosa para reducir el estrés y aumentar la claridad mental. Dedicar unos minutos cada día a la meditación puede ayudarte a calmar la mente y centrarte en el presente. Existen diversas técnicas de meditación, como la meditación guiada, la meditación mindfulness o la meditación trascendental. Encuentra la que más resuene contigo y hazla parte de tu rutina diaria.

2. Ejercicio Físico

El ejercicio físico no solo mejora tu salud física, sino que también tiene un impacto positivo en tu bienestar mental. Actividades como correr, nadar, practicar yoga o incluso dar un paseo pueden ayudarte a liberar el estrés y mejorar tu estado de ánimo. Elige una actividad que disfrutes y conviértela en un hábito regular. En mi libro El Camino hacia ti puedes encontrar actividades de moviemiento, como Correr como medio para conectar contigo, La música, el paseo consciente…

3. Actividades Creativas

Las actividades creativas, como pintar, escribir, tocar un instrumento o cualquier otra forma de expresión artística, pueden ser una excelente manera de manejar el estrés y conectar contigo misma. Estas actividades te permiten explorar tus emociones y pensamientos de una manera constructiva y satisfactoria. Incorpora tiempo para la creatividad en tu rutina semanal.

Encuentra lo que Funciona para Ti

Cada persona es única, y lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. Experimenta con diferentes actividades y observa cómo te sientes después de realizarlas. Presta atención a las actividades que te hacen sentir bien y te ayudan a relajarte. Haz una lista de estas actividades y asegúrate de incluirlas regularmente en tu vida.

El Éxito: Reconócelo y Reclámalo

“A veces tienes que olvidar lo que sientes y recordar lo que te mereces”

Frida Kahlo

Esta frase subraya la importancia de reconocer y reclamar tu propio éxito. Muchas veces, el sentimiento de desmerecimiento puede sabotear nuestros esfuerzos y alejarnos de nuestros objetivos. Aquí te dejo algunos consejos para reconocer y reclamar tu éxito:

1.  Reflexiona sobre tu Merecimiento

El primer paso para alcanzar el éxito es reconocer que te lo mereces. Tómate un momento para parar y reflexionar sobre tus logros y tu valor personal. Piensa en todo lo que has conseguido y en las cualidades que te hacen merecedora de éxito. Este ejercicio de reflexión te ayudará a reforzar tu autoestima y a motivarte para seguir adelante.

 2. Reconoce tu Valor y tus Logros

Reconocer tu valor y tus logros es crucial para avanzar. Acepta y celebra tus éxitos, por pequeños que sean. Cada paso adelante es un testimonio de tu esfuerzo y dedicación. Mantén un diario de logros donde puedas anotar y reflexionar sobre tus éxitos diarios y semanales.

3. Fija Metas Alineadas con tus Valores

Otro punto importante a la hora de marcarte tus objetivos es preguntarte, ¿desde dónde me estoy fijando? Asegúrate de que tus metas están alineadas con tus valores y tus deseos más profundos. Establecer metas que reflejen tus verdaderos intereses y pasiones te dará una mayor motivación y satisfacción al alcanzarlas.

Pregúntate:

– ¿Por qué quiero alcanzar esta meta?

– ¿Cómo se alinea esta meta con mis valores y pasiones?

– ¿Qué impacto tendrá esta meta en mi vida y en la vida de los demás?

Desarrollar estrategias personalizadas y reconocer tu propio valor son pasos esenciales para gestionar el estrés y alcanzar el éxito. Con un mejor entendimiento de ti misma, puedes diseñar un plan que funcione específicamente para ti, asegurándote de que tus metas reflejen tus valores y deseos más profundos. Así, no solo lograrás tus objetivos, sino que también disfrutarás del proceso de crecimiento personal y autodescubrimiento.

Conclusión

El autoconocimiento es la base para abrazar el cambio y convertir la incertidumbre en una oportunidad de crecimiento. Comprométete contigo misma, desarrolla estrategias personalizadas y reconoce tu valor. Así, no solo podrás enfrentar los cambios, sino también disfrutar del viaje hacia tus objetivos.

En mi Canal de YouTube tienes disponibles una serie de videos sobre el cambio, te invito a verlos y suscribirte para disfrutar de todo el contenido.:

Espero que estos consejos te sean útiles para aceptar y aprovechar los cambios en tu vida. 

¡Feliz vida! 🎨🧘‍♀️🏃‍♂️

Isabel María 🌸

Terapeuta Holística – Coach de Equilibrio 💌

PD. Escríbeme y cuéntame cómo llevas los cambios.